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En el panorama agroalimentario español, el sector de la aceituna de mesa se posiciona como un referente de excelencia y tradición. Con una producción anual que supera las 408.000 toneladas, según los últimos datos de la Mesa Sectorial del aceite de oliva y la aceituna de mesa, este sector genera empleo y riqueza en las zonas rurales del país. Sin embargo, en los últimos años, ha experimentado una profunda transformación tecnológica, impulsada por la necesidad de optimizar procesos, mejorar la calidad y aumentar la competitividad. Óleo entrevista a Rafael Pleite, consejero delegado de Global Olive para conversar sobre los principales retos a los que se enfrenta el sector de la aceituna de mesa.
¿Cómo empresa tecnológica, especializada en el sector del aceite de oliva y la aceituna de mesa?, ¿cuáles son los principales retos y desafíos que enfrentan estas empresas? ¿Cómo puede la tecnología ayudar a superar estos retos?
El principal reto al que se enfrentan nuestras empresas es adaptar los métodos de producción industriales, a la creciente transformación del actual olivar a una nueva realidad que estará basada mayoritariamente de plantaciones de olivar superintensivas. Las nuevas tecnologías permitirán a la industria solucionar los problemas vinculados a estos nuevos sistemas de producción agrícola, que serán el incremento en el porcentaje de defectos debidos a cosecha así como la gestión de unas cosechas cada vez más cortas, pero a la vez más intensas, con un mayor ingreso diario de materia prima en la industria transformadora.
Desde su punto de vista, ¿qué tipo de tecnologías son las más idóneas actualmente para aplicar en las diferentes etapas de la producción, transformación y comercialización de la aceituna de mesa?
Para la etapa de cosecha y post-cosecha será necesario el desarrollo y aplicación de tecnología de transporte más eficientes, que reduzcan las actuales mermas de calidad relacionadas con defectos y con pérdida de textura de las aceitunas cosechadas. Para las etapas de producción y transformación, sin duda la aplicación de herramientas de digitalización de los procesos tradicionales, así como de mejora de la trazabilidad de los mismos. Y para la etapa de comercialización, el desarrollo de herramientas objetivas que permitan unificar criterios de calidad para garantizar la seguridad alimentaria del consumidor.
A nivel recursos humanos, ¿qué nivel de capacitación están encontrando en las diferentes empresas del sector? ¿Qué necesidades formativas en materia de tecnología son necesarias para los profesionales del sector de la aceituna de mesa?
El creciente uso de nuevas tecnologías que en los últimos 20 años ha ocurrido en nuestra sociedad, se ha visto reflejado también en un mayor interés y capacitación por parte de los técnicos de las empresas dedicadas al sector de la aceituna de mesa, en el uso de las tecnologías de la información y comunicación.
Las principales necesidades formativas del sector se centran actualmente en el manejo de herramientas capaces de digitalizar las etapas claves del proceso productivo, así como en la gestión más eficiente de la creciente producción de datos, fruto de esta nueva era de la digitalización.
Tienes disponible la entrevista para su lectura completa en el número 197 de Óleo.