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La Asociación Española de Normalización (UNE) ha publicado el primer informe de su nueva serie de Estudios Prospectivos, enfocada en el aprovechamiento y valorización de biomasa residual en el sector agroalimentario. Este documento busca sentar las bases para la creación de normas técnicas que impulsen la implantación de tecnologías emergentes en línea con los principios de la economía circular y la transición ecológica.
La biomasa residual de la cadena agroalimentaria, que genera anualmente alrededor de 4 millones de toneladas en España y 30 millones en Europa, representa una oportunidad estratégica para reducir el impacto ambiental y potenciar la bioeconomía. Las tecnologías desarrolladas permiten transformar estos residuos en productos de alto valor añadido para sectores como la industria farmacéutica, química, cosmética, agroquímica y alimentaria.
Un impulso hacia la innovación y la sostenibilidad
El estudio de UNE identifica los retos que dificultan la valorización masiva de los biorresiduos, entre ellos desafíos tecnológicos, normativos y de mercado. Para abordar estas barreras, propone la normalización técnica como herramienta clave para garantizar la trazabilidad, calidad y sostenibilidad de los procesos.
Entre las áreas prioritarias para la normalización destacan:
Este análisis se ha basado en la experiencia de UNE en proyectos europeos de I+D+i, especialmente en el marco del programa Horizon 2020, donde ha trabajado con actores clave del sector industrial y académico.
Colaboración con expertos y entidades líderes
El Estudio Prospectivo ha contado con la participación de entidades relevantes como ATEGRUS, el Centro Tecnológico Nacional de la Conserva y Alimentación (CTNC), ITENE, y empresas innovadoras como Isanatur Spain. También se sumaron organismos públicos como el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITERD), así como plataformas tecnológicas como BIOPLAT.
Hacia un modelo de bioeconomía circular
El documento destaca cómo la investigación y el desarrollo están cambiando la forma de gestionar los residuos agroalimentarios, transformándolos en un recurso valioso para múltiples industrias. Este cambio de paradigma no solo responde a objetivos ambientales, sino que también busca fomentar la competitividad del sector agroalimentario español, reforzando su liderazgo a nivel europeo e internacional.
Con este estudio, UNE da un paso más en su compromiso con la sostenibilidad y la innovación, consolidando su papel como impulsor de la transición hacia una economía más eficiente y respetuosa con el medio ambiente.