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El olivar no solo nos ofrece uno de los alimentos más preciados del Mediterráneo, sino que también juega un papel esencial en la lucha contra el cambio climático. Con la mirada puesta en potenciar esta virtud, el Consejo Oleícola Internacional (COI) ha iniciado un proyecto clave para medir el balance de carbono en el sector, en colaboración con AENOR, uno de los principales organismos de certificación de España.
El pasado 16 de octubre, ambas entidades firmaron el contrato fundacional del 'Proyecto Balance de Carbono', un esfuerzo conjunto que busca crear herramientas y un marco metodológico para evaluar cómo el olivo puede ser parte de los mercados de créditos de carbono. En palabras del director ejecutivo adjunto del COI, Abderraouf Laajimi, el olivar actúa como un verdadero sumidero de carbono, almacenando este elemento de forma permanente tanto en sus raíces como en el suelo que lo rodea. Es por ello que la iniciativa resulta crucial para el futuro del sector y para su contribución a la sostenibilidad global.
Un camino hacia la sostenibilidad y los créditos de carbono
El COI lanzó este proyecto a principios de 2024 mediante una convocatoria pública de licitación, adjudicada finalmente a AENOR. Esta empresa española, reconocida por su labor en la normalización y certificación de procesos en diversos sectores, será la encargada de desarrollar tanto el marco metodológico como las herramientas de software que permitirán medir el balance de carbono de los olivares.
El propósito es claro: facilitar una herramienta sencilla y eficiente para que los productores puedan evaluar su huella de carbono, lo que les permitiría acceder a los mercados voluntarios de créditos de carbono, una oportunidad de ingresos adicional que premia las buenas prácticas medioambientales.
Una alianza estratégica con AENOR
Durante la firma del contrato en la sede del COI, Susana Lozano, directora de AENOR, expresó su agradecimiento por la confianza depositada en su equipo y subrayó la relevancia de esta colaboración para los países miembros del COI. Esta iniciativa no solo fortalecerá la competitividad del sector oleícola, sino que también proporcionará una herramienta crucial para que los productores puedan demostrar su contribución positiva al medio ambiente.
Además, el proyecto contará con un equipo de seguimiento, y las primeras reuniones de coordinación están previstas para el 7 de noviembre en Córdoba. Esto asegura que el desarrollo de la herramienta esté en línea con los plazos establecidos y que las partes involucradas mantengan un flujo constante de comunicación.
AENOR: garantía de calidad y sostenibilidad
Con más de tres décadas de experiencia, AENOR se ha consolidado como una entidad referente en la promoción de la calidad y la seguridad en múltiples sectores. Su capacidad para desarrollar normas y ofrecer servicios de certificación ha sido clave para que muchas organizaciones mejoren su eficiencia operativa y cumplan con las regulaciones vigentes.
En este proyecto, AENOR se encargará de aportar su conocimiento técnico para crear una metodología estandarizada que permita medir el balance de carbono de manera fiable y replicable en cualquier país miembro del COI.
El Olivar: un actor clave en la lucha contra el cambio climático
Este proyecto no solo posiciona al olivar como un cultivo clave en la transición hacia una agricultura más sostenible, sino que también pone de relieve la importancia de cuantificar su impacto en la lucha contra el cambio climático. Con un balance de carbono positivo, los olivares pueden desempeñar un papel crucial en la captura de CO2, contribuyendo de manera tangible a reducir las emisiones globales.