Revista
El otoño de 2022 está siendo particularmente intenso para la labor promocional de la Interprofesional del Aceite de Oliva Español. A pocas semanas del lanzamiento de la nueva campaña en el mercado nacional (protagonizada por Jose Coronado y su hijo Nicolas), se pone en marcha la destinada al mercado japonés, que se une a las que se están desarrollando en Alemania y México en colaboración con la Unión Europea.
Pero a diferencia de otras campañas desarrolladas en el exterior, la de Japón despega en un lugar a 11.000 kilómetros de Tokio. En concreto, la acción inaugural ha tenido lugar en Jaén. Durante tres días, cinco famosos blogueros nipones han realizado una inmersión en la cultura de los aceites de oliva, empezando por el proceso de elaboración de nuestros aceites, desde el árbol hasta la botella. También se les ha informado sobre su valor económico, social y gastronómico, así como la aportación al bienestar de este alimento. Sin olvidar, por supuesto, su contribución medioambiental e, incluso, paisajística. De hecho, coincidiendo con la celebración del Día Mundial del Olivo, el pasado sábado, pudieron disfrutar del mar de olivos desde el cielo, gracias a un vuelo en globo aerostático.
La elección de los influencers no ha sido casual. Cuatro mujeres (Ishii Rina, Haruka Nohara, Mika Sakamoto y Sano Mayo) y un hombre (Tomoki Takemura) unidos por su apuesta por una vida activa y saludable, en donde una alimentación equilibrada es fundamental. Entre ellos encontramos periodistas, modelos e incluso una de ellas tiene un negocio agrario. Se trata de Haruka Nohara que, además, participa en un famoso reality show y fue finalista japonesa en el certamen para elegir a la representante japonesa en la competición de Miss Universo en el año 2016. Entre todos suman unos 800.000 seguidores en sus redes sociales, lo que les otorga una enorme influencia entre el público más joven de Japón, siempre atento a nuevas tendencias en alimentación, sobre todo ligadas al bienestar.
Una potente campaña de información
La campaña se extenderá hasta mayo de 2023 e incluye una enorme variedad de acciones, entre otras, una miniserie para televisión de 10 episodios. En ella, un celebrity deportista, modelo, actor y chef enseñará a usar los Aceites de Oliva de España de una forma sencilla y atractiva informando de sus valores nutricionales. Por supuesto, la campaña tendrá un enorme despliegue en el universo digital. Además del trabajo con influencers y redes sociales, se van a realizar concursos, publicidad digital y una colaboración con Cookpad, el servicio de intercambio de recetas más grande de Japón, con unos 60 millones de usuarios mensuales, produciendo 24 recetas originales japonesas elaboradas con Aceites de Oliva de España y que tendrán visibilidad en el punto de venta. Asimismo, se está trabajando en una potente colaboración con Rakuten, la mayor plataforma de venta online en Japón, que potenciará las ventas de nuestros aceites durante todo el periodo navideño. Igualmente contaremos con publicidad exterior en estaciones de ferrocarril de las principales ciudades del país, así como en establecimientos de distribución.
Un mercado bien desarrollado
Con un consumo de alrededor de medio kilo de aceites de oliva por habitante, podemos considerar el japonés como un mercado maduro, en el que el consumidor medio conoce el producto, aunque es necesario incrementar los momentos de consumo, así como integrarlo mucho mejor en el día a día del hogar medio. Ahí, España tiene mucho que ganar ya que nuestros aceites siguen mejorando su posición en ese mercado desde que en 2014 conseguimos el liderazgo en ventas. Los últimos datos disponibles son los referidos a los nueve primeros meses de este año, periodo durante el cual las importaciones de Aceites de Oliva de España alcanzaron las 27.225 toneladas, prácticamente la misma cantidad que en 2011. Eso significa que el 57,86% del total de aceites importados fueron vendidos por nuestro país. Sin embargo, el valor de las ventas ha aumentado en un 24,92%, hasta superar los 113 millones de euros. Una consecuencia del fuerte incremento del valor medio del kilo de nuestros aceites de oliva, que ha pasado de exportarse a 3,06 euros por kilo en 2021, a 4,17 euros en los nueve primeros meses de 2022. En una década, la cuota de mercado de España ha crecido en casi 14 puntos.