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La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos, COAG-Andalucía, no entiende las "desafortunadas declaraciones" de la consejera andaluza de Agricultura, Elena Víboras, ante la denuncia de esta organización respecto a la calidad del aceite de oliva en determinados casos que la Administración conoce. COAG ha denunciado que se han detectado muestras en las que el contenido de los envases no se corresponde con lo que indica su etiqueta, de ahí que haya exigido al Ministerio que “extreme los controles para garantizar la calidad del aceite y la transparencia del mercado y que las infracciones de la ley se sancionen con dureza, pues suponen un engaño al consumidor y tiran por tierra el esfuerzo por la excelencia que viene realizando el sector olivarero”.
En respuesta a esta demanda, la consejera de Agricultura ha declarado que las disfunciones detectadas en los aproximadamente 3.000 controles que se realizan en Andalucía apenas llegan al 8%, un porcentaje que para COAG no es en absoluto despreciable. En palabras de Miguel López, secretario general de esta organización agraria, “no entendemos que la consejera minimice estos datos. Si consideramos que las muestras analizadas son representativas del conjunto de aceite envasado, pensar en un 8% del total es una auténtica barbaridad. Además, ¿qué significa que el 8% presenta disfunciones? Que lo aclare y lo explique, que el Gobierno andaluz tiene competencias en comercio para perseguir el fraude y a quien lo comete. Exigimos tolerancia cero contra el fraude, y transparencia en todo el proceso: que se sepa quién no hace las cosas bien, sea quien sea y caiga quien caiga”.
Elena Víboras ha declarado que el sector del aceite es "bastante serio", además de ser "de los que más está avanzando y en plena ebullición”. COAG pide que “la Administración también sea seria, y que trabaje para defender a un sector que, efectivamente, en su mayoría es serio y profesional, sancionando de forma contundente a quien no lo sea”.
Además, reitera la necesidad de que las Administraciones estatal y regional vayan de la mano del sector en su apuesta por la transparencia, “dando así el mejor servicio a los consumidores de un producto excelente como es nuestro aceite de oliva, que no puede seguir siendo utilizado como reclamo ni verse sometido a la especulación. COAG exige juego limpio, rigor, transparencia y sanciones ejemplarizantes para quienes cometen irregularidades”.