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El sector agroalimentario andaluz ha invertido más de 1.100 millones de euros en innovación y 387 millones de euros en I+D interna en total desde 2002 a 2015. En Andalucía el sector agroalimentario invirtió más de 47 millones de euros en innovación (datos 2015). De ellos, 32 millones se invirtieron en la Industria de Alimentación y Bebidas; 15 millones de euros en agricultura, ganadería, silvicultura y pesca.
Las empresas del sector agroalimentario andaluzas destinaron más de 57 millones de euros a I+D interna en 2015. De ellas, la Industria de Alimentación y Bebidas invirtió 33 millones de euros y 24 millones de euros se invirtieron en Agricultura, ganadería, silvicultura y pesca.
Estos son algunos de los datos que presentó Ricardo Domínguez García-Baquero, Viceconsejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural de la Junta de Andalucía que inauguró las III Jornadas de Innovación en Alimentación organizadas por el Colegio Oficial de Ingenieros Agrónomos de Andalucía celebradas en la EOI en Sevilla, donde dio la bienvenida su director Francisco Velasco.
Pero la innovación no solo se emplea en los productos, sino en los procesos permitiendo mejoras que repercuten en el medio ambiente, en la calidad, en la eficiencia, en el ahorro de energía, en la competitividad de las empresas y haciendo los procesos más transparentes de cara al consumidor gracias también al uso de nuevas tecnologías.
Jerónimo Pérez Parra, Presidente del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (IFAPA), ha destacado en su ponencia “Proyectos de Innovación en el Sector Agroalimentario” el trabajo desarrollado por IFAPA en consonancia con la demanda del mercado. “Trabajamos para mejorar herramientas en el sector agroindustrial que les permitan diversificar su producción como la formulación de nuevos productos, presentaciones de productos novedosas (como el ajo o la cebolla negra)”. “Además se acompaña con el desarrollo de conocimiento desde la producción hasta la elaboración o el diseño de productos terminados (derivados lácteos como yogures o como el queso curado con incrustaciones de jamón), una idea extraordinaria, que esperamos que tenga mucho recorrido en el mercado”, dijo.
Pérez Parra explicó un trabajo muy destacable de innovación en los procesos de elaboración de aceite de oliva como la incorporación de tecnologías de ultrasonido de potencia para sustituir alguna fase del proceso. Indicó que mejora el proceso y la estabilidad del aceite y al mismo tiempo presenta un importante ahorro de energía.
Además, destacó productos muy interesantes como quesos curados con incrustaciones de jamón, yogur de cabra con mermelada de higo y castaña, ajo y cebolla negra, snacks de hortalizas saludables, entre otros.