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Debido a la escasez de aceite de oliva, los productores italianos temen no poder garantizar sus productos a los consumidores en los próximos meses. En un contexto tan difícil, el constante impulso promocional podría incluso anticipar el agotamiento de las ya escasas cantidades de aceite de oliva disponibles.
Es una crisis para el aceite de oliva virgen extra. La culpa la tiene la desastrosa campaña oleícola, afectada por sequías y episodios de clima extremo, y el incremento de los precios de las materias primas. La situación ha sido denunciada por la Asociación Italiana de la Industria del Aceite, ASSITOL adherida a Federalimentare y Confindustria, que ya anunció las dificultades del sector el pasado otoño.
Andrea Carrassi , director general de la ASSITOL explica, “Está ocurriendo lo que temíamos al inicio de la campaña –, debido a la baja producción, nuestro sector corre el riesgo de no tener la cantidad de aceite de oliva virgen extra suficiente para abastecer el mercado en los próximos meses”.
Contexto
Italia ha registrado una fuerte caída en la producción, equivalente a un 30% menos de aceite de oliva. Sin embargo, ha sido sobre todo la situación de España, primer productor mundial de aceite de oliva, la que pesó sobre los mercados, que vieron reducidas a la mitad sus cantidades debido a la prolongada sequía, situándose en 700.000 toneladas. Esta contracción récord ha generado un repunte de los costes de las materias primas, a lo que se han sumado las subidas de los precios de la energía y los envases. Por lo tanto, la disponibilidad de aceite, tanto en Italia como en el extranjero, es mínima. Además, según las primeras previsiones de la próxima campaña, la situación está destinada a empeorar, debido a la continua sequía en España y en gran parte del Mediterráneo.
El escenario, también a futuro, estará marcado por la escasez de materias primas y por el aumento de los costes de producción, con claras repercusiones en el consumo. Sin embargo, la menor disponibilidad de aceite y las consiguientes subidas de precios no han frenado las ventas promocionales, poniendo en riesgo las ya escasas cantidades de aceite de oliva virgen extra disponibles.
“En los últimos meses, el aceite de oliva se ha convertido en un bien preciado y el uso de productos por debajo del costo podría anticipar el agotamiento de nuestros productos. Por eso realizamos una llamada al sentido de responsabilidad de toda la cadena de suministro, desde la agricultura de producción a la industria que representamos, hasta la gran distribución, para que sea posible garantizar el aceite de oliva en las mesas italianas”, explica el director general de ASSITOL.