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El Olive Oil World Congress (OOWC) organiza en la sede de la FAO en Roma una jornada titulada: “Día Mundial del Olivo FAO: Una mirada hacia el futuro”, este 24 de noviembre, en la que expertos del sector del olivar y del aceite de oliva han puesto en valor la importancia de este cultivo para todos los países productores y consumidores para celebrar el Día Mundial del Olivo, el 26 de noviembre.
En palabras de Máximo Torero, jefe y subdirector general del Departamento de Desarrollo Económico y Social de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación en Roma: “el cultivo del olivar tiene una importancia fundamental a nivel mundial debido a la versatilidad y valor tanto económico como cultural que aporta. Es una actividad económica importante en muchos países y tiene un impacto social significativo, ya que emplea a muchas personas y a menudo involucra a pequeños productores”.
Con esta jornada, el Olive Oil World Congress (OOWC) que organiza su primera edición del 26 al 28 de junio en Madrid, reafirma su compromiso con el sector del olivar y del aceite de oliva. Y es que, debido a la difícil situación que atraviesa el sector, es importante recordar el valor de este producto como motor de desarrollo económico en diversas regiones del mundo, además de su importancia para la biodiversidad, el medioambiente y, por supuesto, la salud.
El valor del mercado
La jornada ha comenzado con la bienvenida e inauguración a cargo de Juan Prieto, Representante Permanente Adjunto de España ante la FAO; y de Manuel Barange, Subdirector General y Director de la División de Pesca y Acuicultura de la FAO.
Según Barange, “el mercado del aceite de oliva mundial alcanzó un valor de 14,2 mil millones de euros, siendo España el principal productor en el mundo, con un 25% del total, y produciendo en la media de los últimos cinco años un 50% del total, seguido de Italia, Marruecos y Túnez”. “Sin embargo, la industria olivarera en el Mediterráneo se enfrenta a múltiples desafíos, como la volatilidad de los precios, la competencia con otros aceites vegetales o los etiquetados fraudulentos. Pero sin duda, el principal problema es el cambio climático, ya que se prevé que con un incremento de las temperaturas de 1,5ºC, la producción mundial podría caer un 20%”, ha asegurado.
A continuación, Di Yang; experto en aceite vegetal en la División de Mercados y Comercio de FAO, intervino para hablar sobre "El aceite de oliva en el mundo: ¿un sector económicamente viable?".
La siguiente ponencia ha corrido a cargo de Mladen Todorovic, del Instituto Agronómico Mediterráneo de Bari (CIHEAM Bari), quien ha mostrado a los asistentes las "Soluciones sostenibles para el cultivo del olivo: uso eficiente del agua en un contexto de cambio climático".
Durante el evento, también se ha presentado el OOWC a los miembros de la FAO y asistentes a la jornada. Un proyecto colaborativo que ofrece al sector la posibilidad de unir a todos los operadores a nivel internacional para trabajar juntos con el objetivo de ayudar a solucionar los problemas que existen y aprovechar mejor las oportunidades que se generan.
La salud como bandera
Antonio Escribano, Catedrático de Nutrición Deportiva de la Universidad Católica de Murcia, España, y Especialista en Endocrinología y Nutrición, ha hablado sobre el "Aceite de oliva y salud, un binomio inseparable". Para Escribano, “el aceite de oliva puede considerarse la mejor grasa de nuestro planeta y sus efectos beneficiosos para la salud están ampliamente demostrados, gracias a sus compuestos fenólicos y fitoesteroles que reducen la absorción de colesterol en el intestino, además de sus efectos antiinflamatorio y antioxidante; este maravilloso producto previene enfermedades cardiovasculares o enfermedades metabólicas, entre otras”.
Bajo el título "El sector mundial del aceite de oliva: una mirada al futuro", se ha llevado a cabo una mesa redonda moderada por Juan Prieto, Representante Permanente Adjunto de España ante la FAO, en la que han estado presentes Nevena Alexandrova, Agricultural Extension Officer of Innovation FAO; Wafaa ElKhoury, Jefe de Servicio para ECA y NENA, Centro de Inversiones de la FAO; y Khaled El Taweel, coordinador de programas en el Centro de Coordinación de Sistemas Alimentarios de la ONU.