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Un grupo de expertos internacionales ha participado estos días en el III EIT Food Innovation Forum, donde se han puesto en común los últimos estudios sobre nutrición y salud. Esta vez el formato ha sido virtual.
En dicho encuentro se dieron a conocer varios estudios recientes, entre ellos uno realizado por EIT Food analizando las 109 iniciativas desarrolladas en los últimos años en el sur de Europa para reducir la obesidad para “entender el continuo aumento de la obesidad infantil a pesar de las medidas que se están implantando”, explicó Lorena Savani, del consorcio europeo.
Maria Hassapidou, de la Federación Europea de las Asociaciones de Dietistas, dio las pautas de cómo prevenir la obesidad en la sociedad, un problema que “se ha triplicado” en los últimos años en el sur de Europa, y ha superado a los países del norte porque “desgraciadamente ya no se sigue la dieta mediterránea de forma tan estricta, se ha reducido la actividad física y ha aumentado el consumo de bebidas azucaradas y alimentos procesados”. Aunque no es partidaria de aumentar los impuestos a esos productos -“es la última medida que tomar”- prefiere una apuesta por “fomentar alimentos más saludables”.
Inteligencia artificial y nutrición
El neurólogo Ignacio Hernández Medrano relató las innumerables aplicaciones prácticas de la inteligencia artificial en el ámbito de la salud, y también en la nutrición. Basándose en el hecho de que “las máquinas ven correlaciones donde la mente humana no las ve”, esta tecnología ayuda a diagnosticar múltiples enfermedades. Por ejemplo, una máquina puede predecir el riesgo cardiovascular examinando el fondo ocular de una persona, algo que ningún humano puede hacer”. También es posible predecir quién va a responder a ciertos tratamientos, “y todo esto es aplicable a la nutrición”.
En el EIT Food Innovation Forum se habló también del potencial de la microbiota (los microorganismos presentes en el cuerpo humano, y en concreto en el intestino, “un campo que aún tiene que crecer muchísimo”, según Luca Cocolin, profesor de la Universidad de Turín. Del mismo modo, se explicaron aplicaciones de la inmunonutrición. “A medida que aumenta la edad, la respuesta inmune es más baja”, explicó Ascensión Marcos, del CSIC, que relató como “hay pacientes de Covid que al salir del hospital están teniendo problemas en la piel, el intestino, el hígado…. Sobre todo, los de mayor edad, más los hombres que las mujeres. Y también las personas obesas”.
Asimismo, los científicos alertaron sobre las empresas que intentan vender productos para supuestamente fortalecer nuestro sistema inmune frente al Covid. “No hay ninguna evidencia científica que lo pruebe”, aseguraron.
José María Ordovás ofreció la ponencia principal junto con su hijo José Manuel (científico de Harvard). Hablaron de “las dos pandemias actuales, el Covid y la obesidad”. En los últimos meses han investigado sobre los tejidos afectados por el virus. “Hemos tratado de entender cada célula” y como resultado han encontrado “nuevos datos para ver cuáles son las células que intervienen en el Covid y hemos compartido nuestra experiencia con otros equipos”, explicó Ordovás hijo. Su padre, pionero en nutrigenómica, aportó algunas conclusiones de sus estudios recientes: “La dieta mediterránea, que se considera sana, puede ser mejor para unas personas que para otras en función de su genética. Tiene más beneficio para quienes están más predispuestos a la enfermedad”, explicó, y apuntó un dato: “Hay 90.000 derrames al año en España, solo con medidas preventivas se podrían prevenir 9.000”. También se refirió a las bebidas azucaradas y aclaró: “Hay personas a las que sí hay que recomendar no tomarlas. A otras esa recomendación puede ser más laxa. Quienes tienen baja predisposición a la obesidad, esas bebidas tendrán poco impacto. Pero a quienes tengan alta predisposición, sí les afecta”.
En este momento trabaja en un estudio científico que, usando la inteligencia artificial, “se puede predecir la respuesta individual a una dieta”. Por ejemplo, “gemelos idénticos tienen respuestas muy diferentes”. Y también, “se podría conseguir con la nutrición de precisión que un diabético contagiado de Covid pueda tener síntomas leves de la enfermedad, en vez de que sean graves”.
Retos de la dieta saludable
En la sesión del viernes, Gregorio Varela, presidente de la Fundación Española de Nutrición, ha enumerado los principales desafíos para la nutrición, como son: “pensar en la salud tanto de los humanos como del planeta”, “una dieta saludable tiene que ser abordada en positivo, mucho más que enfocarla solo a la prevención de factores de riesgo y enfermedades asociadas”, “una dieta será más sana cuanto más nos alejemos de mitos y de la desinformación”, “lo que comemos tiene una influencia decisiva en la sostenibilidad”. Además, lanzó una pregunta: “¿estamos avanzando a una transición hacia unos nuevos principios y una dieta diferente a raíz de la pandemia de Covid?
Begoña Pérez-Villarreal, directora de EIT Food para el sur de Europa, ha concluido las jornadas llamando la atención sobre los retos de la nutrición para todos: la sociedad, los consumidores, los científicos y el sector agroalimentario, y abogó por “adaptar los modelos de negocio a los cambios en la sociedad descubriendo dónde están las oportunidades. Es el mejor momento para la innovación, porque hay sensación de urgencia y falta de recursos, y estamos fuera de nuestra zona de confort”.