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El índice de precios de los alimentos de la FAO se situó en mayo de 2021 en un promedio de 127,1 puntos, es decir, 5,8 puntos (un 4,8 %) más que en abril y 36,1 puntos (un 39,7 %) más que en el mismo período del año pasado. El aumento de mayo representó el mayor incremento intermensual desde octubre de 2010. También supuso la 12.ª subida mensual consecutiva del valor del índice, que alcanzó su valor más elevado desde septiembre de 2011, situándose apenas un 7,6 % por debajo del valor máximo de 137,6 puntos registrado en febrero de 2011. El acusado incremento de mayo se debió a un aumento repentino de los precios de los aceites, el azúcar y los cereales unido al afianzamiento de los precios de la carne y los productos lácteos.
Los precios de los aceites vegetales, según se puede ver en el índice de precios de FAO se situó en un promedio de 174,7 puntos en mayo, lo que supone un incremento intermensual de 12,7 puntos (un 7,8 %) y representa la 12.ª subida mensual consecutiva. Esta continua fortaleza del índice refleja principalmente la subida de los valores de los aceites de palma, soja y colza.
Las cotizaciones internacionales del aceite de palma se mantuvieron en una trayectoria alcista en mayo y alcanzaron su nivel más elevado desde febrero de 2011, ya que el débil crecimiento de la producción en los países de Asia sudoriental, junto con la creciente demanda mundial de importaciones, hizo que las existencias de las principales naciones exportadoras permanecieran en niveles relativamente bajos. En cuanto al aceite de soja, las perspectivas de robustez de la demanda mundial, especialmente del sector del biodiésel, favorecieron la subida de los precios, mientras que los valores internacionales del aceite de colza se vieron sostenidos por la continua escasez de la oferta mundial.
Los cereales, experimentaron igualmente durante el mes de mayo un incremento de 7,6 puntos (un 6,0 %) más que en abril y 35,7 puntos (un 36,6 %) por encima de su nivel de mayo de 2020. Entre los cereales principales, los precios internacionales del maíz fueron los que más subieron, con un incremento de 12,9 puntos (un 8,8 %) en mayo, alcanzando un valor de 75,6 puntos (un 89,3 %) por encima del registrado el año pasado y el nivel más elevado desde enero de 2013.
Los factores que afectaron a este incremento se deben fundamentalmente a la previsión de reducción de producción en Brasil que han acentuado la presión sobre la oferta mundial, que ya era ajustada debido a la fuerte demanda sostenida. Sin embargo, hacia finales de mes los precios del maíz comenzaron a retroceder, fundamentalmente a causa de las perspectivas de aumento de la producción en los Estados Unidos de América. Los precios internacionales de la cebada y el sorgo también aumentaron en mayo, en un 5,4 % y un 3,6 %, respectivamente. Tras el aumento repentino de los precios del trigo a principios de mayo, la mejora de las condiciones de los cultivos, sobre todo en los Estados Unidos de América y la Unión Europea, provocó un marcado descenso de los precios a finales de mes. Aun así, en promedio los precios del trigo superaron en 8,0 puntos (un 6,8 %) a los de abril y en 27,7 puntos (un 28,5 %) a los de mayo de 2020.
Aunque el primer pronóstico de la FAO sobre el comercio mundial de cereales en 2021/2022 indica un aumento de apenas el 0,3 % respecto del elevado nivel estimado para 2020/2021, mucho dependerá del volumen de cereales que importe China. El comercio mundial de cereales en 2020/2021 podría incrementarse hasta en un 6,3 %, alcanzando un nivel máximo de 468 millones de toneladas. Sin embargo, la mayor parte de este acusado incremento se debe al acusado incremento de las importaciones de cereales en China, que se prevé aumentarán en 30 millones de toneladas (un 123 %) respecto de la campaña anterior.