La compañía Agroindustrial Siracursa S.A., de la localidad chilena de Villa Prat, en la comuna de Sagrada Familia, ha sido reconocida por sus medidas adoptadas para garantizar el avance de su cosecha de aceitunas a pesar de a irrupción del Covid-19. El Gobernador de Curicó, provincia donde se ubica la localidad, viajó junto a la Secretaria Ministerial de Agricultura, Carolina Torres, para comprobar, in situ, el funcionamiento de la compañía.

Curicó es una de las provincias con mayor superficie frutícola en la región de Maule, una de las dieciséis regiones en las que se divide la República de Chile. El olivo es la sexta especie más plantada en la región, con 5.025 hectáreas, y la comuna de Sagrada Familia posee 1.488 hectáreas del total regional.

Desde la Secretaría Ministerial de Agricultura, Carolina Torres puso a la empresa como ejemplo de buenas prácticas. En el campo todos los funcionarios llevan mascarillas y cuentan con su propio gel desinfectante. También así en la planta de proceso, donde es tan las líneas de entrada y salida. El gerente Diego Heiremans recibió la felicitación de las autoridades por el cumplimiento de los protocolos, y recalcaron, asimismo, el "compromiso de la agroindustria provincial".