Revista
El proyecto LIFE Olivares Vivos+, continuación del LIFE Olivares Vivos desarrollado entre 2015 y 2021, ha comenzado los trabajos de recuperación de biodiversidad en las nuevas fincas donde se está poniendo en marcha este modelo agrícola, que ha demostrado que es posible compatibilizar el respeto a la flora y la fauna con producción y rentabilidad. Un hito especialmente importante dado que, por primera vez, las intervenciones de restauración ambiental se desarrollan también fuera de Andalucía.
A partir de ahora, estas actuaciones tendrán lugar en olivares de Extremadura, la Comunidad Valenciana y Castilla-La Mancha, aparte de continuar en la región andaluza. Un logro que, además, nos sirve para conmemorar el Día Mundial del Olivo; una efeméride que se celebra cada 26 de noviembre. Así, estas nuevas explotaciones servirán para seguir conociendo la biodiversidad del olivar y su evolución, pero también para mostrar a los agricultores de estas comunidades autónomas, y a los de otras vecinas, las ventajas que aporta un modelo de olivicultura que trabaja a favor de la naturaleza.
Recuperar la flora y la fauna del olivar ofrece toda una serie de servicios, como el control natural de las plagas, la mejora de la fertilidad del suelo o una mayor capacidad de almacenamiento de agua de lluvia. Pero, además, permite que los AOVE (Aceites de Oliva Virgen Extra) producidos en ellas se diferencien gracias al valor añadido que aporta la recuperación efectiva y certificada de la biodiversidad.
La primera finca en la que se han comenzado estas actuaciones ha sido Valdearenales (Guareña, Badajoz). Hasta allí se han llevado 750 plantas leñosas, de 25 especies distintas, que se están plantando en los lugares previamente identificados por el Plan de Actuaciones para la Recuperación de Biodiversidad Olivares Vivos (PARB-OV). Para esta intervención, además, se usarán protectores ecológicos, biodegradables y compostables, así como cañas naturales para sostenerlos, con lo que se evita el uso de productos derivados del petróleo y la acumulación de residuos que generen un impacto negativo en el entorno.
El PARB-OV fue elaborado por los técnicos de SEO/BirdLife, socio coordinador del LIFE Olivares Vivos+, específicamente para este olivar y, en los próximos meses, se trabajará en la mejora de la gestión de la cubierta herbácea e, incluso, en su diversificación mediante la siembra puntual de semillas en las calles del olivar. Finalmente, se instalarán estructuras de apoyo a la fauna, tales como cajas nido, cajas abrigo para murciélagos, postes para rapaces, bebederos o pequeñas charcas.
Futuras actuaciones de Olivares Vivos+ en Europa
Estos trabajos se realizarán, de igual modo, a través del LIFE Olivares Vivos+, en otras fincas repartidas por algunas de las principales regiones olivareras de la Unión Europea no sólo de España, sino también del Alentejo, Portugal; la Toscana y Lacio, Italia, y Creta y el Peloponeso, Grecia. Con ello, se han sumado 16 nuevas fincas a los 20 olivares demostrativos andaluces participantes en el proyecto inicial LIFE Olivares Vivos.
Además, otras 3 nuevas explotaciones, ubicadas en las provincias de Almería y Granada, servirán para analizar el efecto que el cambio climático tendrá sobre este modelo de olivicultura. Para la realización de todas estas actuaciones de restauración de biodiversidad se contará con la participación de cuadrillas de trabajadores experimentados, favoreciéndose la creación de empleo rural.