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La Fiscalía de Turín (norte) ha abierto una investigación a siete empresas de venta de aceite italianas, entre ellas Bertolli, Sasso o Carapelli, pertenecientes al grupo español Deoleo, por presunto fraude, acusadas de embotellar aceite de oliva virgen como virgen extra, tras la denuncia de un diario mensual especializado, Il Test, que explicaba que 9 de 20 botellas analizadas en el laboratorio químico de la Agencia de Fronteras de Roma habían resultado ser simple aceite de oliva virgen, mientras que estaban etiquetadas como virgen extra. Así, el fiscal ordenó la realización de pruebas de varias botellas de aceite de diferentes marcas que se venden en supermercados de Turín y los resultados probaron que en algunas de ellas el aceite era sólo virgen y no extra.
Ante estas acusaciones, Deoleo ha aclarado que “el análisis físico‐químico del laboratorio de Aduanas de Génova demuestra que nuestros productos están dentro de la norma de los aceites de oliva virgen extra (VE) que establece la legislación italiana. Los productos de Deoleo cumplen con todos los parámetros físico‐ químicos (peróxidos, ácidos grasos libres, análisis espectrofotométricos K232 y K270, ésteres totales, ésteres etílicos)”. Aseguran también que sus registros “correspondientes a la fecha de envasado demuestran que los productos investigados estaban absolutamente dentro de la norma tanto en los análisis físico‐químicos como en la cata”.
Respecto a la cata efectuada por la policía italiana, señalan que “es un análisis sensorial en el que un grupo de expertos valora simplemente el olor y sabor del aceite. Las verificaciones efectuadas, ya sea por la revista Il Test como posteriormente por los NAS (Núcleos Antisofisticación y Sanidad) de Turín por encargo de la Fiscalía de la República, se basan exclusivamente en una prueba de cata del producto”. Añaden que “dichas verificaciones, si bien las han llevado a cabo catadores profesionales, están consideradas en muchos aspectos insuficientes, dado que se trata de un método de análisis subjetivo, no repetible y no reproducible”. La legislación italiana establece un plazo legal de 30 días para que Deoleo pida una prueba de contraste para verificar los resultados de la cata efectuada por el NAS, la cual ya han solicitado.