Revista
El consejero de Agricultura, Pesca y Desarrollo Rural, Rodrigo Sánchez Haro, ha presidido esta semana en Sevilla la reunión de la Mesa de Sanidad Vegetal, convocada para “compartir con el sector toda la información que tenemos disponible” tras la confirmación el pasado viernes, 30 de junio, de la detección del primer caso de Xylella fastidiosa en la Península Ibérica y “analizar conjuntamente esta nueva circunstancia”. Sánchez Haro ha insistido en un mensaje de tranquilidad, ya que la detección ha sido posible gracias a la colaboración de un agricultor y “a que se han intensificado las prospecciones y el control”.
En su intervención, el consejero ha explicado a los integrantes de la Mesa (representantes del sector y del Gobierno autonómico) que en el caso del foco detectado en Alicante, el propio afectado acudió a los servicios de sanidad vegetal de la Comunidad Valenciana al observar una reducción de la producción de almendras de su plantación. “Quiero agradecer a los agricultores y viveristas su labor y colaboración activa en la vigilancia de esta enfermedad bacteriana en Andalucía”, ya que la cooperación de todos los agentes implicados es una “condición esencial para hacer frente a esta amenaza fitosanitaria”.
El titular de Agricultura ha apostado también por la unidad en el ámbito nacional, donde “vamos a trabajar para alcanzar una estrecha colaboración con la Administración General del Estado”.
Además, el consejero andaluz ha informado de que está previsto reforzar la vigilancia en zonas limítrofes y explotaciones con especies sensibles y convocar al grupo científico asesor, un equipo formado por científicos y técnicos de relevancia en materia de patología vegetal y que presta apoyo en el diseño y ejecución de actuaciones. La Junta contempla también el establecimiento de un protocolo de actuación ante posibles avisos, habilitando incluso un teléfono de atención y consultas o una cuenta de correo electrónico, y “hacer una revisión exhaustiva” del procedimiento de trabajo de vigilancia y de actuación en caso de detectarse la enfermedad en la región.
Con esta situación, desde UPA reclaman un plan de acción que contemple un proyecto de investigación, control, formación de técnicos, de agricultores y ayudas suficientes para los agricultores afectados. Consideran que la Consejería debe coordinar un plan de acción urgente contra la Xylella en el que participe todo el sector para frenar una enfermedad que lleva varios años expandiéndose por el Mediterráneo, desde Italia hasta Baleares y finalmente hasta Alicante, donde se confirmó su presencia el pasado viernes. UPA Andalucía ha destacado que este plan de acción no puede olvidar a las producciones ecológicas, de gran implantación en cultivos como el almendro, olivar o los cítricos, ya que “actuar contra los vectores puede provocar la pérdida de certificación y repercusiones económicas graves”.
UPA Andalucía demanda también “un plan de ayudas directas para los agricultores que sufran arranques en sus explotaciones por la presencia de infección de Xylella”. Esta enfermedad en el peor de las situaciones puede incluso causar la muerte de los árboles afectados, por lo que las pérdidas por el arranque pueden ser cuantiosas, teniendo en cuenta que hablamos de cultivos leñosos que tardan años en producir. Las indemnizaciones tienen que ser “las justas y en el momento oportuno” afirman desde la organización agraria.
Por su parte, el secretario de Organización de COAG Andalucía, Eduardo López, ha recordado que “los agricultores son los que mejor conocen sus explotaciones y que su colaboración es esencial para vigilar y controlar el posible avance de la bacteria”. Por eso, COAG ha pedido que con la máxima celeridad posible se concreten, de manera coordinada entre Ministerio de Agricultura y Comunidades Autónomas, las medidas compensatorias para los productores que resulten afectados. “El Decreto Ley de Sanidad Vegetal prevé indemnizaciones en estos casos, pero no está desarrollado cómo, cuándo ni cuánto. Los productores deben tener la seguridad de que recibirán una compensación en cantidad y tiempo razonable por el lucro cesante y por la nueva plantación”, ha explicado López.