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El "Observatorio de Cajamar sobre el sector agroalimentario español en el contexto europeo", realizado por un equipo de investigadores de la Ivie y la Universitat de València, constata en su informe de 2020 un crecimiento del 5,3 % en el valor añadido del sector primario (agricultura, ganadería y pesca). Un dato positivo que, aunque no ha permitido compensar el retroceso de la industria y la distribución, mucho más afectados por los efectos de la pandemia, sí ha limitado la contracción del sector en su conjunto al -2,5 %, frente a la caída del -10,8 % del PIB nacional.
El sector destaca por su productividad, un 38 % superior a la media de la UE-27, y por el avance de las exportaciones, que han vuelto a registrar un máximo histórico de ventas, 54.840 millones de euros, un 2,3 % más que en 2019, ha destacado el presidente de Cajamar, Eduardo Baamonde, para quien “estos datos ponen de manifiesto que en 2020, tras declararse la pandemia, el sector agroalimentario ha reforzado su importancia como sector estratégico al garantizar el abastecimiento de alimentos a la población confinada, así como la continuidad del empleo y la actividad económica”.
España es uno de los países más afectados por la crisis de la covid-19, con una caída del PIB y el empleo del -10,8 % y el -5,2 %, respectivamente. Aunque el sector agroalimentario (incluida la distribución) también ha sufrido las consecuencias de la crisis, el descenso registrado en valor añadido y empleo (estimado en el -2,5 % y -4,6 %, respectivamente) reflejan un mejor comportamiento que la economía en su conjunto.
Pese al descenso del -2,5 % registrado en el valor añadido, el sector agroalimentario (sector primario, industria y también distribución) ha aumentado ligeramente su peso en el PIB nacional hasta suponer el 9,7 % del total, 0,8 puntos más que en 2019 y 3,2 puntos por encima de la media europea (6,5 %). Esto demuestra la mayor especialización de la economía española en este sector. En total, el valor añadido del agroalimentario en España asciende a 99.355 millones de euros. Con estas cifras, nuestro país se sitúa como la cuarta economía del sector agroalimentario de la UE, ya que aporta el 12,7 % del VAB comunitario del sector. España es el principal productor de ganado porcino, aceite de oliva y cítricos de la UE-27, con una cuota de mercado del 21,7 %, 40,5 % y 61,1 %, respectivamente.
En el mismo informe se incluye el análisis de los principales subsectores del sector agroalimentario español, desde las materias primas en sí hasta su transformación, citando tanto el subsector de las aceitunas, como la producción del aceite de oliva.
Perspectiva del sector del aceite de oliva
El análisis sectorial, incluido en el Observatorio con respecto a la fabricación de aceite de oliva, señala que este aporta el 3 % del valor añadido (VA) de la industria de la alimentación en 2019 y duplica su contribución en el caso de la facturación (6,6 %). Ambas magnitudes caen este último año, un 1,7 % y 3,5 %, respectivamente. En 2019 el VA alcanza los 534 millones de euros y la cifra de negocios se sitúa en 7.167 millones de euros..
Si bien, el VA y el empleo cayeron en 2019, el sector de fabricación de aceite de oliva aumentó su empleo un 4,6 %, dando trabajo a 10.923 personas (el 2,8 % del empleo total de la industria de la alimentación).