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La campaña de aceituna de mesa en Extremadura está a punto de comenzar, pero lo hace con un panorama complicado. A partir del próximo lunes 9 de septiembre, se inicia la recolección en el norte de la región con una cosecha que se espera sea significativamente menor que en años anteriores. Este descenso en la producción se debe principalmente a dos factores: la vecería del olivo, que implica una menor producción tras un año de buenas cosechas, y la escasez de lluvias, especialmente en zonas como Tierra de Barros, donde la falta de agua ha afectado al tamaño de las aceitunas.
Producción mermada y destinación al aceite
La previsión es que la producción de aceituna manzanilla cacereña ronde los 20 millones de kilogramos, una cifra muy por debajo de lo habitual. En cuanto a la variedad carrasqueña, todo dependerá de si las lluvias de otoño hacen acto de presencia. En caso de que no llueva, gran parte de esta cosecha en Tierra de Barros se destinaría a la producción de aceite en lugar de para aceituna de mesa.
Precios bajo lupa: 1,20 €/kg como mínimo
A pocos días del inicio de la campaña, La Unión Extremadura ha emitido un mensaje claro a las industrias transformadoras: cualquier contrato para la compra de aceituna de entamado por debajo de 1,20 €/kg será denunciado ante la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA). Según los cálculos de costes de producción realizados por la Unión, ese es el precio mínimo necesario para cubrir los costes de producción. La advertencia se basa en el artículo 9 de la Ley de Mejora de la Cadena Alimentaria, que busca proteger a los agricultores de precios injustos.
Pese a que La Unión ha solicitado la apertura de negociaciones con las industrias, estas aún no han respondido. A tan solo cinco días del inicio de la campaña, la gran mayoría de los contratos aún no se han firmado, lo que genera incertidumbre en el sector.
Este arranque de la campaña de aceituna de mesa se perfila complicado, no solo por la caída de la producción, sino también por la lucha para asegurar precios justos que protejan a los agricultores.