Revista
El pasado 19 de abril el consejero de Desarrollo Rural y Sostenibilidad del Gobierno de Aragón, Joaquín Olona, se ha reunido con las organizaciones agrarias aragonesas (UAGA, ASAJA, UPA y ARAGA) para valorar los daños producidos por la crecida del Ebro y sus afluentes en los cultivos y explotaciones ganaderas, concentrados fundamentalmente en la Ribera del Ebro.
El consejero ha anunciado que el Gobierno de Aragón complementará con ayudas los daños donde no llegue el seguro agrario “hasta cubrir el 100% de los daños en cultivos y ganados”. Asimismo, Olona ha comprometido ayudas para “reponer las infraestructuras agrícolas tanto privadas como colectivas de cuyos beneficiarios también tengan seguro”. Tambien, ha recordado la necesidad de la implicación del Gobierno central. “La Administración General del Estado debe actuar porque en materia de inundaciones tiene responsabilidad, por lo que lo justo es que colabore”, apuntaba Olona.
La superficie de cultivo inundada es de 14.000 hectáreas y en total 19.000 hectáreas se han visto anegadas. La estimación de daños agrarios se estima en 25 millones de euros, donde se incluyen pérdidas de producción y daños en infraestructuras agrarias públicas y privadas. No se incluyen los costes de las actuaciones necesarias para prevenir y mitigar los daños de futuros eventos, así como de reposición de los daños en las infraestructuras de protección.