Revista
Dado que las negociaciones comerciales entre la UE y el Reino Unido van tocando a su fin, los agricultores y cooperativas agrarias europeos, los fabricantes de alimentos, operadores comerciales y trabajadores del sector agroalimentario, publican la presente declaración conjunta para indicar los próximos pasos:
Nuestra prioridad es salvaguardar los puestos de trabajo y la prosperidad del sector agroalimentario. En esta recta final, instamos a los negociadores a cerrar un acuerdo comercial global, sin aranceles ni contingentes, con una estrecha armonización de las normativas, inclusive las que rigen las medidas sanitarias y fitosanitarias y los obstáculos técnicos al comercio. Tenemos que pugnar por instaurar unas condiciones equitativas, también en lo que respecta a los derechos de los trabajadores.
Independientemente de que se logre un acuerdo o no, he aquí nuestras cinco peticiones urgentes:
1.- Cuando concluyan las negociaciones, necesitaremos claridad inmediata sobre las normas que regirán la futura relación comercial entre la UE y el Reino Unido, a fin de evitar mayores turbulencias económicas e incertidumbre laboral en un sector ya bastante lacerado por la pandemia de la COVID-19.
2.- El Reino Unido abandonará el Mercado Único y la Unión Aduanera, lo que conllevará más procedimientos aduaneros, más carga burocrática y un incremento de los costes del transporte. Un brexit sin acuerdo, con los aranceles y los importantes requisitos aduaneros que ello implicaría, generará una situación nefasta. Puesto que probablemente las empresas agroalimentarias sufrirán más a causa del brexit que otros sectores, se requerirán medidas específicas para suavizar la transición, además de un amplio apoyo procedente de la Reserva de Ajuste por el brexit de la UE.
3.- Las autoridades públicas tendrán que organizar con rapidez campañas de información eficaces para ayudar a las empresas a comprender las nuevas normas y a planificar sus operaciones.
4.- Hay proteger los derechos de los trabajadores y brindar a las empresas la asistencia necesaria para preservar los puestos de los millones de empleados que trabajan en la cadena agroalimentaria europea.
5.- El diálogo continuo con la Comisión Europea y las autoridades del Reino Unido, así como con los interlocutores sociales y los actores interesados, será fundamental para dar respuesta a las posibles perturbaciones y emergencias que surgirán después del 31 de diciembre de 2020.