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Un equipo de investigación de la Universidad de Jaén (UJA), en colaboración con la Universidad de Tecnología y Economía de Budapest (Hungría), ha desarrollado un método que emplea levadura en la obtención de biocombustible para vehículos a partir del hueso de aceituna. La incorporación de estos microorganismos reduce el precio de la obtención de bioetanol, que mezclado con gasolina sirve como carburante y es más sostenible que el habitual.
Además de su uso en automoción, los investigadores apuntan las aplicaciones alimentarias y farmacéuticas de otras sustancias obtenidas con este método, como el xilitol -sustituto del azúcar para personas diabéticas- y compuestos antioxidantes, que pueden emplearse para desarrollar productos antimicrobianos.
En la actualidad, la mayoría de la biomasa del olivar normalmente se desecha o se quema. Sin embargo, los investigadores de la Universidad de Jaén proponen una técnica que emplea dos tipos de levaduras para aprovechar al máximo este residuo. Por un lado, Saccharomyces cerevisiae, con la que eliminan compuestos tóxicos. Por otro lado, Candida boidinii, para transformar casi un 63% de la solución restante en xilitol.
En el artículo "Improved xylitol production from olive stones hydrolysates by biological detoxification" publicado en Journal of Cleaner Production, los expertos explican las técnicas bioquímicas utilizadas para obtener xilosa, solución desde la que se produce xilitol. En este trabajo, añaden otros dos tratamientos con los que "potencian" la producción de este xilitol, y además proponen la obtención de bioetanol y antioxidantes.
Este trabajo ha sido financiado por la Agencia Estatal de Investigación, el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER) y el Ministerio de Ciencia e Innovación. También ha recibido apoyo del proyecto TNN:16-123305 del Fondo Nacional de Investigación, Desarrollo e Innovación de Hungría.