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A través de la iniciativa “Better Planet Packaging”, Smurfit Kappa sigue liderando las soluciones de envasado sostenible para sus clientes. A pesar de que el Bag-in-Box ya es un envase altamente sostenible que supone una reducción significativa de plástico y de las emisiones de CO2, Smurfit Kappa sigue trabajando en la innovación de materias primas, concretamente con la incorporación de resinas recicladas o bio-basadas a sus grifos y bolsas, en los casos en los que la normativa de seguridad alimentaria lo permite. Recientemente han dado un paso más en esta dirección al haber obtenido la certificación ISCC PLUS.
La fábrica Vitop de Alessandria (Italia), donde se produce Vitop® Original, el grifo más vendido para Bag-in-Box®, puede presumir de ser la primera planta de la industria del Bag-in-Box® en obtener la certificación ISCC PLUS. Esta certificación garantiza que los procesos industriales y normas de la empresa cumplen con la cadena de custodia de estas resinas bio-basadas y recicladas.
ISCC es un sistema de certificación de sostenibilidad aplicable a nivel mundial y a todas las materias primas sostenibles, incluidas las resinas de origen biológico y reciclado y los envases de plástico. Con más de 4600 certificados válidos en más de 100 países, ISCC es uno de los mayores sistemas de certificación del mundo, desarrollado mediante un proceso abierto de múltiples partes interesadas y dirigido por una asociación de más de 160 miembros, incluyendo institutos de investigación y ONG.
Gracias a esta certificación, Smurfit Kappa podrá poner en marcha proyectos piloto junto con sus clientes e incorporar resinas procedentes del reciclaje químico a sus grifos y bolsas en un futuro próximo.