Revista
Durante la última década, la Política Agrícola Común (PAC) ha priorizado medidas centradas en la sostenibilidad y la calidad sobre la producción. El estudio publicado recientemente en Agronomy bajo el título “Characterisation of Organic Olive Farmers in the Framework of M11 of the Common Agricultural Policy”, califica a los agricultores y explotaciones ecológicas de Andalucía, cubriendo algunas lagunas de información detectadas en la ejecución del proyecto AGRICORE. Se ha seguido el marco M11 con el fin de llenar los vacíos de información detectados en las fuentes de datos públicos disponibles que alimentan la herramienta AGRICORE. Hasta 2013, las explotaciones con mayor producción eran recompensadas con una mayor retribución económica. Sin embargo, ha habido un cambio de enfoque, priorizando la sostenibilidad y la calidad sobre la producción. M11 es clave para esto.
En el olivar andaluz
Con el fin de estudiar el impacto de la M11 en el sector olivarero andaluz, se llevó a cabo una campaña de encuestas para recoger datos de los productores de oliva ecológico y sus explotaciones agrícolas. La encuesta se realizó a 189 productores de olivo orgánico, lo que corresponde al 10% de los agricultores que hicieron la transición al cultivo de olivo orgánico en el período de interés (2014-2017). De los datos recogidos analizados, destaca que la mayoría de los olivareros desconocen dos aspectos: (i) los costes de explotación, cruciales para las cuentas de las empresas, y (ii) el hecho de pertenecer a zonas ambientalmente protegidas, lo que ha un impacto positivo en la recepción de ayuda asociada al M11.
Además, los resultados muestran que la edad promedio de los agricultores orgánicos es de alrededor de 60 a 65 años, más del 35% son mujeres, poseen educación primaria o secundaria y la mayoría de ellos son propietarios de granjas. Entre los resultados más importantes destaca que el 74% de las explotaciones se dedicaban exclusivamente a la producción de olivar ecológico, con una producción media de 1.000 kg/ha. La mayor parte de esta producción se destina exclusivamente a la producción de aceite de oliva. Además, se encontró que más del 87% no se plantea abandonar la agricultura ecológica. Estos resultados contrastan con la elevada reticencia de los agricultores convencionales (más del 80%) a la transición a la producción ecológica, como se desprende de las primeras observaciones de encuesta realizadas entre este tipo de olivareros.
Instantánea del sector
En conclusión, este estudio podría ser de considerable interés para muchas partes interesadas y puede tener un impacto significativo en el sector oleícola andaluz. Por un lado, los datos recopilados y su análisis proporcionan a los responsables políticos una instantánea actualizada de la situación del cultivo del olivo en Andalucía, en particular, del sector del cultivo del olivo ecológico. Además, los responsables políticos podrían beneficiarse de la herramienta AGRICORE para diseñar políticas mejoradas que impliquen un aumento de la producción de aceituna ecológica. Por otro lado, los productores de olivos pueden beneficiarse de estas nuevas políticas porque tendrán la oportunidad de expresar sus necesidades, que luego se tendrán en cuenta al desarrollar nuevas políticas agrícolas. Además, este estudio aumenta la posibilidad de trabajos futuros, incluidos análisis de datos adicionales, como la comparación de la agricultura orgánica y convencional. Por último, también podría permitir explorar nuevas líneas de investigación, como un estudio exclusivo de los costes de explotación del cultivo del olivo.
El estudio ha sido realizado por el departamento de I+D, Cooperativas Agro-Alimentarias de Andalucía; la división de Energía y Tecnologías de la Información, Idener Technologies; el departamento de Economía Agrícola, Universidad Aristóteles de Tesalónica; la Facultad de Gestión, Universidad de Ciencia y Tecnología de Bydgoszcz de Polonia y el Instituto de Agrofísica, Academia Polaca de Ciencias de Polonia.