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ASAJA-Jaén agradece que la Ministra García Tejerina se haya pronunciado en contra de la renacionalización de la PAC y el copago de las ayudas. La organización agraria, que siempre ha defendido esta postura, pide unidad política y de criterios en este sentido. Recuerda que de este tipo de ayudas dependen la estabilidad, seguridad y garantía de los agricultores de la provincia. Para la organización agraria, la PAC es y debe seguir siendo una Política eminentemente Común y su estructura debe de seguir estando basada en los dos pilares: pagos directos y medidas de mercado y, como segundo pilar, políticas horizontales.
ASAJA-Jaén rechaza una cofinanciación de la Política Agraria Común (PAC) en la reforma que se aplicará después de 2020, valorando positivamente que el Ministerio de Agricultura en palabras de su ministra Isabel García Tejerina, también se haya posicionado en este sentido. La reforma de la PAC, que plantea dar más responsabilidad a los gobiernos en su gestión, ha despertado preocupaciones sobre una posible cofinanciación en caso de recorte de los fondos, por lo que Asaja-Jaén exige “posición común y unidad política” para conseguir una buena financiación que aporte estabilidad, “un presupuesto fuerte y rechazar una cofinanciación como vía para debilitar esos fondos”.
Para la organización agraria, la PAC es y debe seguir siendo una Política eminentemente Común y su estructura debe de seguir estando basada en los dos pilares: pagos directos y medidas de mercado y, como segundo pilar, políticas horizontales. Son indispensables normas y fondos comunes que garanticen el buen funcionamiento del mercado único europeo y permitan evitar distorsiones de la competencia. La futura PAC debe estar al servicio de todos los ciudadanos y agricultores de la Unión Europea, por lo que “la renacionalización de esta política es inaceptable”, insiste Luis Carlos Valero, gerente y portavoz de ASAJA-Jaén. Valero considera que la PAC necesita “un presupuesto digno y suficiente para poder cumplir con sus objetivos”. Recuerda que desde Europa se exige a la agricultura europea una serie de cumplimientos y esfuerzos en cuanto a prácticas productivas, estándares de calidad, condiciones de bienestar animal o respeto medioambiental y usos de los recursos naturales que no tienen comparación en otros países terceros con los que debemos competir dentro y fuera de nuestras fronteras.
Por ello, hay que valorar positivamente el acuerdo alcanzado en Alemania para contribuir al presupuesto de la UE a partir de 2021 y un mayor desarrollo de la PAC. Son necesarias inversiones en capital humano, en formación, en maquinaria y en utilización de factores de producción para poder responder a estas exigencias garantizando un aprovisionamiento de alimentos de calidad, trazabilidad y garantía sanitaria y veterinaria a precios razonables para el consumidor. Hay que recordar que el gasto de la PAC es de menos del 1% del gasto público del conjunto de la UE y los Estados Miembros.