Revista
La Comisión Europea desveló a mediados del mes pasado su esperada Comunicación sobre el «restablecimiento de ciclos del carbono sostenibles», más conocida como «la Comunicación sobre la captura de carbono en suelos agrícolas». A esta Comunicación le seguirá una propuesta legislativa sobre la certificación de la eliminación del carbono, que se deberá publicar antes de que termine el 2022.
Las organizaciones europeas Copa y Cogeca ven con buenos ojos que la captura de carbono mediante las actividades agroganaderas forme parte de la agenda política, y que se tomen medidas de ahora en adelante para aprovechar al máximo el potencial que posee la agricultura para atajar el cambio climático y aspirar a una Europa más ecológica.
Como indican las asociaciones, dicha comunicación se concibe como un nuevo modelo empresarial «ecológico» para remunerar por aquellas prácticas de manejo de la tierra que provoquen un incremento de la retención de carbono en la biomasa viva, los suelos y/o la materia orgánica muerta, ya sea potenciando la captura de carbono o bien limitando el carbono que se libera a la atmósfera. Copa/Cogeca valoran que la Comisión reconozca que la captura de carbono en los suelos agrícolas depende en gran medida del lugar, por lo cual no procede aplicar un enfoque único.
En dicho documento, se señala algunos desafíos que afrontarán los agricultores a la hora de aplicar las prácticas para la captura de carbono en los suelos agrícolas, por ejemplo: la carga financiera (incluidos la incertidumbre respecto a los ingresos y los costes de la puesta en práctica), los escasos servicios de asesoramiento específico y un acceso limitado a la información, las trabas normativas, y la gran complejidad y los elevados costes de un sistema de supervisión, revisión y verificación robusto. Asimismo, se pueden encontrar ejemplos de prácticas mejoradas de gestión de la tierra que dan como resultado una mayor absorción del carbono.
Copa y Cogeca, lamenta que el uso de fertilizantes orgánicos no figure en dicha Comunicación, aun tratándose de una práctica muy beneficiosa en lo que se refiere a la captura de carbono, la biodiversidad, los recursos hídricos y el suelo.
«El sector agrícola ya se esfuerza por llevar a cabo prácticas de captura de carbono en suelos agrícolas e invierte en ello desde antes de que se publicara la Comunicación de la Comisión. Por lo tanto, hay que reconocer tales esfuerzos y estimular la inversión de aquí en adelante. A demás, consideramos importante que se conceda cierta flexibilidad en lo relativo a la financiación y que se promuevan los regímenes privados en los que participen activamente los agricultores.», ha destacado la presidenta del Copa, la Sra. Christiane Lambert.