Revista
Un reciente estudio ha demostrado el potencial de la espectroscopia de infrarrojo cercano (NIRS) como una herramienta rápida y rentable para analizar la calidad del aceite de oliva virgen extra (AOVE). Este avance podría revolucionar los programas de mejoramiento del olivo, facilitando la evaluación y selección de genotipos de manera más eficiente.
La Importancia del OSI y los acidos grasos en el AOVE
El índice de estabilidad oxidativa (OSI) y la composición de ácidos grasos (AG) son parámetros críticos para la caracterización de nuevas variedades de AOVE. Tradicionalmente, estos parámetros se determinan mediante métodos como el Rancimat y la cromatografía de gases, los cuales son costosos y requieren mucho tiempo. La implementación de la NIRS ofrece una alternativa más rápida y económica para estos análisis.
En el estudio, realizado por investigadores del IFAPA Centro Alameda del Obispo, el IAS-CSIC y la Universidad de Córdoba, se evaluaron 318 muestras de AOVE de diferentes orígenes utilizando dos instrumentos de espectroscopia: FT-NIR MPA y MicroNIR en modo de transmitancia, con longitudes de onda que oscilaban entre 1100-2500 nm y 908-1676 nm, respectivamente. Los modelos desarrollados con estos instrumentos mostraron diferentes niveles de precisión para los rasgos evaluados, destacándose la simplicidad de los modelos del analizador MPA.
Herramienta confiable
Los modelos derivados de la regresión PLS utilizando datos espectroscópicos de ambos instrumentos demostraron ser altamente robustos. Los resultados fueron consistentes en la partición de la varianza y la estimación de la heredabilidad, así como en la clasificación de genotipos, lo que sugiere que la NIRS es una herramienta confiable para la selección de genotipos en programas de mejoramiento del olivo.
El estudio concluye que la NIRS puede ser una alternativa viable a las metodologías convencionales, proporcionando un análisis rápido, no destructivo y sin necesidad de reactivos químicos. Esta tecnología podría ser especialmente útil en la comparación de numerosos genotipos, agilizando los programas de mejoramiento del olivo.
Este enfoque novedoso, no explorado previamente en estudios NIRS, destaca la gran utilidad del equipo NIRS para la selección y mejora de genotipos de olivo, lo que podría tener un impacto significativo en la industria olivícola.