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Un equipo de investigación andaluz con miembros de la Universidad de Córdoba (UCO) y del Instituto de Agricultura Sostenible (IAS-CSIC), la Plataforma de Genómica y Bioinformática de Andalucía y la empresa Ficus Biotechnology (Turquía) ha secuenciado por primera vez el genoma de la variedad de olivo Ayvalik, según informa la Fundación Descubre. En concreto, los científicos analizaron el ADN de esta especie y Picual (Olea europaea) para identificar genes relacionados con características de interés de estos árboles, como las físicas y nutricionales. Con los resultados, los agricultores podrían realizar cruces para obtener cultivos más resistentes a enfermedades y regular cuestiones como el tamaño o el sabor de las aceitunas.
En el artículo "Genome-wide exploration of oil biosynthesis genes in cultivated olive tree varieties (Olea europaea): insights into regulation of oil biosynthesis" publicado en Functional & Integrative Genomics, los científicos explican que el análisis se centró en las variedades Picual y Ayvalik por ser las más comúnmente cultivadas en España y Turquía, respectivamente, países participantes en este estudio.
Además, éste es el primero que publica la secuencia completa de Ayvalik, que cuenta con 69.028 genes, a diferencia de la variedad Picual, con 55.073 genes.
En el estudio, los expertos explican que cada célula de un organismo contiene ADN, una molécula con aspecto de doble hélice y que, en conjunto, forma el genoma. Éste contiene la mayor parte del material genético del ser vivo al que pertenece, como un código informático con la información que hace que un programa exprese determinadas características y ejerza funciones concretas. En el caso del olivo, por ejemplo, los genes determinan que un árbol produzca frutos en cierta época del año o que éstos contengan cualidades nutricionales específicas.
Actualmente, los investigadores del grupo "Biotecnología Agroalimentaria" (AGR-248) enfocan su labor en aplicar estos estudios de genómica estructural y funcional. Este estudio ha sido financiado por el Ministerio de Ciencia e Innovación (MICINN) y el Instituto Nacional de Investigación y Tecnología Agraria y Alimentaria (INIA). Asimismo, cuenta con fondos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, la Consejería de Transformación Económica, Industria, Conocimiento y Universidades (Junta de Andalucía) y fondos propios de la Universidad de Córdoba. Este trabajo se enmarca en el Consorcio Internacional del Genoma del Olivo (IOGC).